Entre 2013 y 2015 fui becario de la profesora Elizabeth Corral Peña y pude conocer sus interpretaciones crítico-literarias sobre la vida y obra del autor mexicano Sergio Pitol. La lectura de su libro La escritura insumisa me abrió las puertas de un universo comprensivo para asumir una visión muy sólida y profunda de significaciones culturales, simbólicas y estéticas de líneas interpretativas que desbordan la dimensión escrita para brindar una visión muy completa de cómo en el hacer literario existen cifrados significados y trayectorias de muchas formas oblicuos. También pude contribuir en los trabajos del libro Confluencias. Lecturas en torno a Sergio Pitol en el cual tuve oportunidad de profundizar en la vida y obra del premio Cervantes 2005 gracia a los aportes de críticos jóvenes, maduros y experimentados que ofrecieron en ese trabajo sus distintas lecturas y trabajos para brindar un compendio importante de síntesis y aporte a la construcción de juicios y acercamientos entre tradicionales e innovadores para la valoración de la biografía y la obra pitoleana. Este acercamiento al cosmos de Pitol en el boom que significó para los estrechos a la Facultad de Letras Españolas de la Universidad Veracruzana entre 2005 y 2010 representó prácticamente una oportunidad única para aprender a investigar, leer, escribir, comentar textos, observar equívocos y también para estrechar lazos y averiguar posibilidades de lectura, interpretación y formas de estudio. Fue gracias a la cercanía con Sergio Pitol entre 2010 y 2012 que me incentivó a estudiar la universidad en Xalapa, que me inscribí nuevamente a la Facultad de Historia de la Universidad Veracruzana para iniciar cursos en 2012 hasta concluirlos en 2016. Tuve la fortuna y privilegio de que el maestro Pitol y la profesora Corral asistieran a mi examen profesional de historia en aquel año último de mi carrera donde mi licencié con la tesis Ignacio de Luzán en la formación de la República de las letras mexicana a través del Diario de México, 1805-1812, titulándome con mención honorífica y recomendación de publicación del trabajo recepcional.
Cuando desarrollaba mis actividades de becario salió el libro de Pitol El tercer personaje que se presentó en el Museo de Antropología de Xalapa y donde participaron jóvenes críticos, alumnos o en vías de serlo de la profesora Corral, la profesora Nidia Vincent y el propio Pitol. El momento fue inigualable para dar sitio al intercambio y la discusión del libro y para fomentar el intercambio intergeneracional, el diálogo entre comentaristas experimentadas y comentaristas noveles, que sortearon los vericuetos de la prosa ensayística pitoleana y configuraron un escenario de intimidad, invitación a la lectura y difusión de la obra.
Por esos entonces me la pasaba leyendo textos para las experiencias educativas de historia y también textos literarios que el propio Pitol tenía a bien obsequiarme. Me la pasaba también atendiendo cuestiones de índole diversa del trabajo de becario. Pasaba mis ratos libros blogueando. Editaba imágenes, hacía video poemas, hacía grabaciones callejeras, tomaba fotos, me la pasaba en una intensa actividad múltiple. Dentro de las perspectivas de ese entonces pasé mucho tiempo dedicado a tener un excelente perfil académico, prueba de ello son mis ensayos estudiantiles en este blog dentro de la sección Tiempos escritos. En esos intervalos de lecturas, escrituras, video poemas, grabaciones, edición de fotos, testimonios, tertulias de ´ópera, encuentros y vivencias, aguaceros, idas y venidas, ñoquis, camarones, uno que otro viaje y mucho trabajo, lecturas de Pitol me acompañaron, no todas obviamente ni exhaustivamente, traducciones suyas, obras de su hacer, novelas, cuentos, una cierta recopilación de trabajos y libros, hoy pendientes de ese tiempo, resguardo de una parte de la biblioteca que he construido desde entonces hasta hoy.
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